Una delegación del Episcopado nacional chileno finalizó su ciclo de audiencias en la Santa Sede, culminando con un encuentro privado con el Santo Padre León XIV el pasado lunes 27 de octubre. Los obispos manifestaron al Pontífice su adhesión a su persona y Magisterio, además de llevar el saludo de las comunidades y diócesis del país.
Un momento central de la audiencia fue la expresa invitación realizada por el Episcopado al Santo Padre para que visite Chile, un gesto que León XIV agradeció cordialmente, manifestando que «sería para mí una gran alegría y bendición volver a Chile«.
Durante el diálogo, los obispos y el Papa abordaron la situación actual de la Iglesia y del país, discutiendo diversos aspectos de relevancia. El Pontífice animó a los pastores a seguir adelante, exhortándolos a afrontar los desafíos en comunión y sinodalidad, y, sobre todo, a estar cerca de quienes sufren en distintos modos, llevándoles el consuelo y la Esperanza del Evangelio.
POSITIVO BALANCE
Los días martes 28 y miércoles 29 de octubre, la agenda de los obispos continuó con visitas y audiencias en diversos Dicasterios de la Curia Romana. Estas reuniones permitieron compartir experiencias pastorales y reflexionar sobre los desafíos que enfrenta la Iglesia en Chile en diálogo directo con los organismos colaboradores del Santo Padre.
Mons. Cristián Castro Toovey, Obispo Secretario General del Episcopado, expresó su gran alegría por la visita, destacando que «hemos apreciado la cercanía y verdadero interés del Santo Padre y sus colaboradores más directos con el ánimo de conocer y acompañar a nuestra Iglesia que peregrina en Chile y los desafíos de nuestra vida social».
Por su parte, el Arzobispo René Rebolledo Salinas, Presidente de la Conferencia Episcopal de Chile (CECh), calificó los encuentros como una «gran bendición». El pastor resaltó la «calidez humana, gran acogida de pastor, clara enseñanza» de León XIV, y atesoró la misión encomendada: la cercanía a todos, especialmente a los pobres, sufrientes y migrantes que pasan dificultades, servicio que debe realizarse en comunión sinodal.
Para recoger los frutos y orientaciones obtenidas en la Santa Sede, los obispos chilenos se reunirán entre el lunes 10 y el viernes 14 de noviembre para celebrar la 132ª Asamblea Plenaria de la Conferencia Episcopal. En esa instancia, compartirán las experiencias vividas en Roma y definirán los próximos pasos a seguir. (NP-Gemini-Comunicaciones CECH)
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