El equipo programático de la candidata presidencial Evelyn Matthei ha delineado sus prioridades de gobierno en torno a dos ejes centrales: alcanzar un ritmo de crecimiento económico del 4% y abordar la crisis de seguridad. La economista María José Abud, parte del equipo, enfatizó que la meta de crecimiento no es un concepto abstracto, sino la vía directa para generar empleo, apuntando a crear un millón de puestos de trabajo para revertir el actual estancamiento del país.
Para reactivar el mercado laboral y destrabar la inversión, el programa propone el «Pase Pyme», un permiso provisorio de 12 meses que permitiría a las pequeñas y medianas empresas operar sin el laberinto burocrático de permisos, mientras se avanza en la digitalización y simplificación de trámites. Además, se busca reformar los subsidios al empleo existentes, unificándolos en un esquema que transite hacia un Impuesto Negativo al Ingreso, un subsidio masivo que complementaría los salarios bajos para fomentar la formalidad y asegurar ingresos más dignos para los trabajadores sin afectar la contratación empresarial. Inicialmente, este subsidio entregaría un apoyo de $200.000 mensuales a las mujeres por seis meses.
El programa de Matthei aborda la crisis de desempleo, que se mantiene sobre el 8% desde hace más de 30 meses, a través de la formalidad y la flexibilidad laboral. Se plantea la creación de contratos más adaptables que permitan pactar jornadas anualizadas o por hora, útiles para quienes tienen responsabilidades de cuidado o estudios, sin precarizar los derechos laborales. En materia de remuneraciones, el equipo de la candidata criticó los aumentos del salario mínimo que superan el crecimiento de la economía y la productividad, proponiendo que los futuros incrementos se basen en la productividad del país.
En el debate fiscal, la economista cuestionó la forma en que el Gobierno de Boric implementó las recomendaciones del Consejo Asesor de Gasto Público en el Presupuesto 2026. Si bien el Ejecutivo adoptó la idea de eliminar el fondo libre de disposición (glosa republicana), la flexibilización de recursos para el futuro gobierno se redujo de un 10% a menos de un 1%, lo que fue considerado una decisión poco estratégica en año electoral y un límite excesivo para una futura administración.
Finalmente, el equipo de Matthei defiende su propia propuesta de ajuste fiscal, la cual busca recortar gradualmente $8.000 millones de dólares en cuatro años, partiendo con una reducción de $2.000 millones de dólares, priorizando la reducción de gasto social ineficiente para cumplir las metas de balance estructural y mantener la credibilidad del país ante inversionistas. La economista fue enfática al criticar la propuesta de José Antonio Kast de recortar $6.000 millones de dólares en 18 meses, asegurando que esta cifra «no cierra ni técnica ni políticamente». (NP-Gemini-ExAnte)
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